El libro sigue así:

finalmente le concedieron la invalidez absoluta, al año siguiente tuvo un infarto, en ese momento mi hermano estaba en la mili y los primeros días que mi padre estaba en la Uci no quería que avisásemos a mi hermano, después cuando me veía a mi se acordaba de él y lo llamamos, nos costó encontrarle mi hermano estaba de maniobras, al final le dieron unos días de permiso y vino, cuando él llegó le habían ya pasado a una habitación del hospital, desde entonces le fueron surgiendo enfermedades y todas graves, tenía artritis, colesterol alto, luego la sangre muy espesa, le recetaron sintrón y este le produjo azúcar o diabetes, yo le acompañaba a los controles del sintrón cuando mi madre trabajaba , yo entonces no trabajaba, estaba mal del corazón por el infarto, asistía a controles habituales con los médicos y además nos enseño a entender su enfermedad a todo la familia, y le encontraban alguna enfermedad más, tenía mucha fuerza de voluntad, él siempre decía que estaba bien cuando iba al médico aunque no fuese verdad. Llevaba 11 años enfermo y nos hizo entender su enfermedad a todos los miembros de la familia. Pero un día se encontraba mal del corazón, ingreso en el hospital y ya no salió de allí con vida, la noche antes de su muerte mi hermano se quiso quedar con él, pero mi padre no quería, se murió en el hospital a los 59 años y cuando nos lo dijeron no nos lo podíamos creer, Yo cuando lo ingresaban las otras veces parecía la más fuerte junto con mi madre, cuando mi padre se murió me di cuenta de que no era tan fuerte, el día que lo enterramos el 4 de enero de 1999 por la noche cuando todos mis primos hablaban de sus hijos, yo me puse a llorar porque no tenía hijos y mi padre siempre decía que no quería morirse sin ver a sus nietos, aunque mi hermano tampoco tenía hijos en ese momento, mi novio y mi hermano tuvieron que ir a urgencias y me dieron una pastilla para debajo de la lengua y un valium, para que descansase, luego fuimos al médico de cabecera y para dormir bien me receto diazepan, yo quería mucho a mi padre y lo echaba de menos y me costó mucho superar su muerte. Cuando empecé a trabajar no tenía tanto tiempo para pensar y creí que lo había superado pero no era así aunque en ese momento yo no me di cuenta. Ese mismo año yo me casaba en julio y como estaba preparando la boda le dediqué el tiempo a prepararla y me concentre en ella y también en sacarme las oposiciones.